El gambito omega, es una apertura poco conocida que se puede jugar con blancas o con negras. Puede llegar a ser una alternativa muy interesante, a la hora de querer sorprender al rival o incluso para explorar territorios desconocidos.
Su origen es desconocido, pero se tiene constancia de que fue jugado por primera vez a nivel competitivo en el año de 1952, entre Jacobo Patt Rubinstein y Orestes Giustina.
Puede jugarse tanto para jugadores de d4, así como para los que inician la partida con e4 (poco frecuente). Por ejemplo, el blanco puede jugar 1 .e4 y contra la Defensa Alekhine llegar a sorprender con un espectacular 2. D4! Esto no es lo mejor, pero seguramente que, en una partida a cinco minutos, por lo menos más de 20 segundos robaremos al rival. Y ya sabes lo que el tiempo significa.
Para jugar el gambito Omega, hay una clave importante que se debe comprender: la esencia del ajedrez dinámico (te recomendamos estudiarlo). Por ejemplo, si el blanco entrega material a cambio de tiempo y de mayor presencia central, es decir, si el negro toma el peón e4, entonces estará moviendo dos veces el caballo y, por tanto, perdiendo un tiempo para comerse el peón. Mientras que el blanco estará desarrollando sus dos alfiles sin moverlos.
Entonces, el gambito Omega es una alternativa bastante atrevida para jugar determinadas partidas o incluso contra determinados tipos de rivales. Pero, obviamente, no puede constituir la base de tu repertorio.
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